154. Los años cuentan en algo

 

Mis primeros acercamientos al BDMS los tuve cuando estaba en la escuela. Un profesor de Filosofía nos hizo leer un libro del escritor Francés Donatien Alphonse François de Sade, este libro es uno de los más conocidos: 120 días en Sodoma. Creo que desde que empecé con la lectura sentí como que algo en mi forma de pensar con referencia al sexo cambió. Ya había tenido algunas experiencias, pero había algo que faltaba; aunque con el correr de los años comprendí que muchas de las cosas que hacía en la intimidad estaban ligadas a las prácticas sadomasoquistas.

Lamentablemente en mis años de escuela no había mucha información al respecto y la que había estaba en inglés o alemán por lo que dificultaba el acceso. Había descubierto un lugar donde vendían alguno libros antiguos pero que debían ser tratados con cuidado ya que el paso del tiempo había hecho estragos en las hojas y tapa. Además, de estar escritos en castellano antiguo. Sí, el mismo que se usa en la obra de Cervantes El Quijote de la Mancha. Ya casi sin esperanzas, me resigné a quedar solo con la poca información que tenía, hasta que entré a trabajar a un banco español. El gerente, una persona a quien respetaba mucho no solo por ser mi jefe sino como persona, tenía un látigo de veinticinco colas. Así empezó un proceso que llamamos tutoría, en dónde él me enseñó con texto y de manera práctica a ser un buen Dominante; ya tenía 23 años pero el proceso de educación duraría dos años, ya que él se tomaba el BDSM como algo serio y me lo dijo cuando empezamos: "Mira chiquillo, yo puedo enseñarte todo lo que sé pero que te enamores del BDSM es solo tu decisión, pero no me hagas perder tiempo y esfuerzo en enseñarte".

Doy gracias por encontrarlo, por el tiempo que dedico a corregir mis errores y a mostrarme que el BDSM no era solo una ronda de nalgadas hasta que arda la mano sino que hay muchas más responsabilidades y prácticas que realizar. Puedo decir que fuí formado a la "Vieja Escuela" y me siento orgullo de ser una pieza de museo para muchos. Hoy, con el correr del tiempo me veo en la necesidad de escribir un pequeño artículo con el que quiero transmitir algo y espero sus opiniones sinceras al respecto.

"Más sabe el diablo por viejo que por diablo". Este dicho aunque es algo popular no deja de ser verdad. Todo en esta vida que vale la pena cuesta algo. Tiempo, esfuerzo, energías, dinero, etc. He vivido el BDSM por 17 años y no como un juego pasajero de alcoba o porque se puso de moda. Lo he vivido como estilo de vida y como filosófica en mi diario vivir. Cuando lo llevas como es, facilita entender mucho las cosas.

Unos preguntarán porque cuento mis años en el BDSM. Los cuento no para ufanarme de ello. Los cuento porque dentro de estos años hay cosas que aprendí. Cosas que ahora sé. Cosas que los "newbies" o "novatos" ignoran porque solo se afanan por tener una relación D/s a toda costa sin saber que es lo que implica tener sumisa (no digamos más que una). No es por gusto que las cosas pasan como pasan. Todo tiene su razón de ser. EL BDSM no es la EXCEPCIÓN.

Tener una relación D/s es como construir una casa. No puedes comenzar a construir el techo sin tener las paredes y sin tener los cimientos. Tampoco se puede lanzar a la aventura de la construcción sin saber los costos que implica hacer la casa. Además, la casa una vez construida se le debe dar mantenimiento. Se debe cuidar. Lo mismo sucede con una relación D/s. Tener varias relaciones D/s es como construir un edificio. Si no puedes mantener una casa menos un edificio. Tu responsabilidad aumenta.

Sesionar es como recoger los frutos de un árbol después que lo has cuidado. No esperes tener buenos frutos si no lo cuidas. No esperes que esa sesión transcurra muy bien si no has hecho lo propio.

Ambos, Dominante y sumisa son responsables por el éxito o fracaso de una relación D/s. Hay cosas que nunca se dicen pero van implícitas en toda relación D/s.

1. Una relación BDSM Cuesta tenerla, cuesta mantenerla pero su recompensa es deliciosa.

2. Eventualmente habrán desacuerdos.

3. Siempre habrán metiches que opinen y hagan chismes de tu relación.

4. Serás victima de críticas, acechos y mentiras, pero sigue adelante porque algo estas haciendo bien.

5. Toda relación nace, vive y muere. Es rico comenzar. Super seguir. Una mierda terminar, duele. Te caes, te levantas y sigues.

6. Hay personas que desearán estar con tu Amo. Hay personas que desean tu sumisa. Piensa con la cabeza no con los genitales.

7. Ten siempre claros los acuerdos que has tomado, honra tu palabra ya seas Dominante o sumisa; porque aquello que dices pesa mucho en la percepción que los demás tendrán de ti.

8. Busca siempre información, nunca dejes de aprender. La historia se sigue escribiendo, siempre hay algo nuevo que aprender y en el BDSM esa opción es infinita.

9. No critiques a quien piensa diferente, sino que expone tu diferencia con respeto, así das una buena impresión y las personas se acercarán a ti para buscar un consejo ya que tienes la capacidad de hacer ver qué eres de aquellas personas que respeta a las otras a pesar de pensar diferente.

10. Disfruta tu relación al máximo. Vívela cómo si fuera el último día y valorala como si fuera el primer día juntos. 

Pasiones Prohibidas ®