141. Odaxelagnia: la razón por la que te excita que te muerdan



¿Cuando estás teniendo sexo te gusta que te den suaves mordiscos? Tranquila: ¡no eres el único! De hecho, hay muchas personas a las que les excita muchísimo incorporar un poco de "dolor" leve en el terreno sexual que juegue con el lado más salvaje que todos tenemos dentro. De hecho, son tantas las personas a las que les gusta esta sensación que se la ha bautizado con el nombre de "odaxelagnia" y, actualmente, es una de las parafilias más comunes en la sociedad. En este pequeño artículo hablaremos sobre la odaxelagnia o por qué te excita que te muerdan para que, así, entiendas de donde viene este estímulo tan extraño pero, a la vez, tan placentero.

Si te excita que te mordisqueen mientras estás teniendo sexo con tu pareja debes saber que tienes una parafilia que se conoce con el nombre de odaxelagnia y es una de las más comunes entre la sociedad.

Cuando estás teniendo relaciones con alguien y la temperatura empieza a subir, es habitual que nos desinhibamos y dejemos explotar esa parte más salvaje de nosotros mismos. Los impulsos sexuales son totalmente naturales en nosotros y, por tanto, si nos dejamos llevar por ellos podemos empezar a sentir la energía y vigorosidad de la pasión y el desfreno. Esta situación puede conllevar a que arañemos, apretemos con fuerza el cuerpo de nuestro amante o, incluso, mordamos suavemente.

La excitación de los mordiscos se relaciona, por tanto, con aquellas personas más apasionadas que se dejan llevar en la cama y dejan atrás la vergüenza o timidez. La excitación y el instinto sexual es algo que los humanos, como animales que somos, también tenemos y por mucho que ocultemos, de vez en cuando puede salir a la luz.

Es por este motivo que hay muchas, muchísimas personas, a las que les excitan los mordiscos y, por tanto, tienen odaxelagnia. Suelen ser personas a las que les gusta disfrutar libremente del sexo y vivirlo de una forma apasionada y sin restricciones, por eso, a menudo se suele confundir esta parafilia con otras de índole más sadomasoquista pero no tiene ni punto de comparación. A una persona puede excitarle que la muerdan suavemente el cuello y, sin embargo, no gustarle en absoluto que la dominen.

La persona que tiene odaxelagnia se excita tanto mordiendo como recibiendo los mordiscos, esencialmente, porque se está dejando totalmente libre para poder experimentar los impulsos sexuales sin tabús.


Precauciones y consejos para disfrutar al máximo de la odaxelagnia

Puede ocurrir que, en una pareja, haya un miembro que tenga odaxelagnia, es decir, que le gusten los mordiscos en la cama pero que haya otro que no. Entonces ¿cómo proceder? Es importante que para que los dos puedan disfrutar al máximo con esta práctica, dejes las cosas claras desde el principio para que no se confundan los términos y, de repente, te encuentres en una situación incómoda y desagradable.

Deja claro tu límite entre el placer y el dolor: cada persona es un mundo y, en el terreno sexual, ¡aún más! Por tanto, orienta siempre a tu pareja acerca del límite que no quieres pasar para que, así, siempre esté informada y pueda darte el placer que buscas. Dile que empiece suave y, si quieres, puedes irle pidiendo que aumente la fuerza para conseguir ese punto exacto que tanto te excita.

La importancia de la higiene: no debes olvidar que mediante la saliva y la piel se pueden transmitir algunas enfermedades, por eso, es recomendable que mantengáis los dos una buena higiene bucal y corporal antes de tener las relaciones sexuales, así, practicaréis sexo seguro y los disfrutaréis muchísimo.

Cuidado con las heridas: en el caso de que la odaxelagnia se les haya ido un pelín de las manos y te haya producido alguna herida o tengas sangre, corre rápidamente a limpiarte para evitar que penetren bacterias en el torrente sanguíneo.

Cuida tus moretones: dependiendo de la fuerza de los mordiscos, es probable que puedan aparecerte algunos morados o hematomas en la piel. En este caso, te recomendamos que lo trates como cualquier otro.

Otras parafilias muy comunes

La odaxelagnia es una de las parafilias más habituales entre la sociedad, sin embargo, ¡no es la única! En el terreno sexual hay una gran cantidad de actitudes que pueden estimular a ciertas personas, esto es lo que se conoce con el nombre de "parafilia" y a continuación vamos a descubrirte tres de las más frecuentes:

Fetichismo
Es el placer sexual que te pueden dar algunos objetos o partes del cuerpo concretas. Por ejemplo, hay muchas personas que sienten fetichismo por los pies y pueden incluso llegar a un orgasmo solo con el frotamiento de los pies en el pene o en su vagina. Puede ser que las medias de mujer o la ropa interior también te excite de tal modo que puedas tener un orgasmo.

Voyeurismo
Si te excitas mirando, espiando, a personas teniendo relaciones sexuales es que eres voyeur. Se trata de un tipo de parafilia muy común en la que la persona no quiere involucrarse en la práctica sexual sino que, únicamente, quiere observar y disfrutar de la escena.

Exhibicionismo
Es otra de las parafilias más comunes de la sociedad y se refiere al placer sexual que una persona puede experimentar al sentirse observado por otra persona. Los exhibicionistas que se dejan llevar su parafilia pueden llegar a estar desnudos en zonas públicas o, incluso, masturbándose sin ningún tipo de reparo o miramiento.

Sea cual sea tu parafilia, disfruta al máximo ya que es el camino que se te ha señalado para llegar al éxtasis.

Pasiones Prohibidas ®

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